Cuando entendemos, percibimos lo que se está creando

Cuando entendemos, percibimos lo que se está creando

Al adquirir entendimiento estamos en armonía con la ley de la causa y el efecto. Empezamos a darnos cuenta de lo que se está creando tanto en nuestra vida como en la de los demás y en nuestro entorno. Podemos ver con claridad lo que cada acción creará ya que entendemos su causa, su propósito y su resultado. Sabemos que si plantamos un árbol de manzanas, lo cuidamos y nutrimos crecerá; que eventualmente su fruto nacerá y si lo recolectamos lo podemos consumir, si no, caerá al suelo y se descompondrá o será consumido por otros seres.

 

Claro que muchas veces veces ciertos resultados están ligados a una serie de acciones y de voluntades. Es como la manzana que no se recolectó, puede descomponerse y formar parte de la tierra o puede ser consumida por otros animales si es que se encuentran cerca y quieren hacerlo. Cada voluntad y cada decisión de todo lo que existe, afecta el resultado de una u otra manera. Sin embargo, cuando tengo conocimiento de que la semilla que planto es de un árbol de manzanas y sé lo que ese árbol necesita para crecer y dar frutos, entiendo la causa y el efecto de tener manzanas en mi propio árbol.

 

Eso a gran escala es lo que el entendimiento me proporciona; el conocer qué acciones debo tomar para los resultados deseados. Si además conozco lo suficiente a los demás y a mi entorno, puedo determinar qué acciones son las mejoras para que las diferentes voluntades y decisiones que suceden a mi alrededor, favorezcan, aporten y permitan mis creaciones deseadas.

 

Observar qué tanto me conozco, qué tanto conozco a las personas en mi vida (familia, comunidad, mundo) y qué tanto conozco el universo en el que vivo, me ayuda a profundizar mi entendimiento. De esta manera reconozco mi pasado y lo que ese pasado creó, crea y creará; conozco mi presente y lo que estoy creando, viviendo, su causa y lo que puede llegar a ser ser; puedo elegir crear mi futuro con el enfoque y la energía adecuada, sabiendo qué pensamientos, palabras y acciones debo de practicar, incluir y alcanzar para vivir mis sueños. También será claro qué debo de evitar, eliminar o modificar en mi vida.

Observa tu presente; entiende el pasado que lo creó y las posibilidades del futuro  

 

Podemos hacer esto en cualquier área de nuestra vida, con nosotros mismos, con mi relación con alguien más o con la situación que vivo con mi entorno. Esta semana elige un área y más adelante puedes practicarlo en otros aspectos de tu vida.

 

Observa lo que estás viviendo y reflexiona acerca de lo que sucedió que hace que vivas esto ahora. Reconoce qué pensamientos, palabras y acciones fueron parte de haberlo creado. También ayuda contemplar cómo te sientes al respecto de lo que vives y si estos sentimientos están ligados a los pensamientos, palabras y acciones que hasta ahora haz tenido que han contribuido a tu presente. 

Imagina qué es lo que puede suceder si continuas con los mismos sentimientos, pensamientos, palabras y acciones. ¿Te permitirán vivir lo que deseas vivir en esa área de tu vida? ¿Pueden contribuir a crear tus sueños y lo que deseas? O ¿simplemente están creando lo mismo que has vivido y que estás viviendo?

 

Explora las posibilidades y lo que puedes cambiar y trabajar para transformar el futuro en el futuro que deseas vivir. Ya sea ser la persona que deseas ser, tener la relación que deseas tener o vivir en un entorno en el que deseas vivir. 

  • Es importante pensar, considerar y meditar acerca de mi, de lo que he vivido y de lo que me hace ser quien soy, o acerca de los demás, lo que han vivido, lo que los hace ser quienes son o acerca de mi universo, lo que ha sucedido y lo que es…. todo lo que sucede es importante y valioso y contribuye al presente y futuro, dale a todo su lugar y podrás entenderlo mejor.
  • Nuestros sentimientos son sumamente importantes y son un mapa que nos permite entendernos mejor. Si logras enfocarte en cómo te sientes en cada situación y relacionas ese sentimiento con experiencias pasadas, es probable que entiendas porque sientes lo que sientes y qué es lo que tus sentimientos te están comunicando, qué es lo que te impulsan a hacer y para qué. Nuestros sentimientos predominantes siempre son una gran motivación para crear lo que deseamos.
  • Nunca juzgues lo que no entiendes. No te juzgues a ti y lo que haces, no juzgues a los demás y como actúan, no juzgues al universo y lo que simplemente es. Todo siempre tiene una razón, un propósito, que si nos detenemos a entender, tendremos más claridad y enfoque en lo que estoy creando y sabré cómo afectarlo o influenciarlo si así lo deseo.
  • Para entender mejor por qué actúas y decides como lo que haces, explora tus sentimientos predominantes y sobretodo, los sentimientos que tienes al actuar de una cierta forma o al tomar ciertas decisiones (sobretodo las de mayor impacto). Empieza a buscar la manera de afectar esos sentimientos para transformarlos, modificarlos o eliminarlos de tu vida e incluir sentimientos y motivaciones más positivas. 

Algunos ejemplos de los cambios que podemos percibir...

 

Cuando logro entenderme mejor, puedo percibir cuando estoy creando algo que no deseo o cuando es momento de elegir algo diferente. Me es más sencillo ser responsable de lo que creo, ya que también podré percibir las oportunidades o los momentos en los que puedo hacer algo diferente y vivir lo que realmente deseo. Mi pasado lo veo con mayor claridad, sin resentimiento ni rencor ni arrepentimiento. Conozco las infinitas posibilidades a mi disposición y puede detener comportamientos o modificar decisiones que ahora sé que no me permitirán el futuro deseado. Estoy más presente ya que mi pasado está sanado y mi futuro lo estoy creando con certeza.

 

Cuando logro entender mejor a los demás, sé como interactuar mejor con ellos; que esperar y que no esperar; ya no me decepcionarán ni me lastimarán; sé quienes son y cómo son; su pasado lo valoro y lo honro. Puedo inspirarlos, apoyarlos mejor y al mismo tiempo elegir cómo y cuál es la mejor manera de relacionarme con ellos; sé que clase de relación no sólo deseo, sino puedo tener. Tomo las mejores decisiones para influenciar la creación de la relación que deseo.

 

Cuando logro entender mejor a mi mundo, sé lo que son las cosas, las personas, los diferentes seres; tengo completa aceptación; sé cómo influenciar mi entorno y cómo me influencia a mi para crear lo que quiero. Ya no sentiré que el mi mundo está en mi contra o que me perjudica sino que seré parte de por completo de él. Entenderé que mi propia mente es mi aliada y me ayuda a enfocarme en lo que necesito para crear lo que deseo. Me entiendo y creo a conciencia. 

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